Las ollas Le Creuset son conocidas mundialmente por ser utensilios de cocina de alta calidad y rendimiento excepcional. Fabricadas con hierro fundido esmaltado, estas ollas son perfectas para una amplia gama de preparaciones culinarias, desde guisos y sopas hasta asados y horneados.
Siguiendo con una tradición que se remonta a la Edad Media, Le Creuset tiene su fábrica en Fresnoy-Le-Grand, en Francia, donde produce sus conocidas piezas desde 1925.
Su éxito y popularidad reside en su durabilidad y funcionamiento en todo tipo de fuentes de calor, desde leña hasta las últimas tecnologías de inducción. Todas las piezas son fabricadas a mano y son únicas, ya que el molde de arena donde se vierte el hierro fundido tiene que ser desechado después de cada uso. Una vez sacada, la olla Le Creuset es pulida a mano hasta eliminar cualquier imperfección o rastro de arena y finalmente, se le aplican varias capas de esmalte sometidas a temperaturas de más de 800ºC (primero se aplica un esmalte sellador transparente y posteriormente el de color) , dando como resultado una pieza final de gran resistencia. El hierro colado esmaltado radia el calor de forma pareja, conserva el calor más tiempo y no reacciona con los alimentos ácidos. Estas características junto con el preciso sellado de su tapa, favorecen la cocción perfecta de los alimentos.
Las ollas Le Creuset son reconocidas por su diseño icónico y su amplia gama de colores vibrantes. El esmaltado exterior e interior no solo les proporciona un aspecto elegante, sino que también ofrece una excelente resistencia a las manchas y una fácil limpieza. Además, el esmaltado es duradero y resiste el desgaste incluso en el uso diario.
Así que, si buscas una olla confiable, elegante y duradera, Le Creusset puede ser la respuesta.
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