La cafetera Moka Express de Bialetti es según el fabricante, el único producto industrial que sigue comercializándose desde 1933 sin haber sufrido modificación alguna. Sencilla, elegante y práctica.
Consta de 3 partes. En la parte inferior está el contenedor dle agua, en la superior la cámara del café terminado, y en medio, el compartimento de filtrado donde se coloca el café molido. La pieza se desenrosca por el medio para rellenar los compartimentos de agua y café molido. Al colocar la cafetera en una fuente de calor, el agua se calienta hasta el punto de ebullición, formándose vapor que termina alcanzando una presión lo suficientemente alta para forzar el resto del agua a subir pasando a través del compartimento de café molido, y terminando así en la cámara superior, donde se acumula el café después de condensar. Cuando la cámara inferior está casi vacía, se forman burbujas que producen un característico sonido de gárgaras que indica que ya el café está preparado. Su elegante diseño permite que se sirva directamente en la mesa, siendo una de sus principales marcas de identidad.
El creador, Alfonso Bialetti, abuelo del afamado diseñador Alberto Alessi, tenía un pequeño taller de metalurgia en Crusinallo, Italia, donde experimentó con diseños de cafeteras y desarrollando la archiconocida cafetera Moka. Se cree que se inspiró en las primeras lavadoras, cuyo funcionamiento era similar. Decidió fabricarla en aluminio por la capacidad de este metal para retener y transmitir el calor, y por que su porosidad le permite absorber el sabor del café, produciendo un café más sabroso con cada uso. Un gran diseño avalado por las más de 200 millones de unidades vendidas desde 1933.